Cuando se habla de esta práctica es necesario comprender que cualquier cambio podría ser muy significativo. Según feng shui con qué mano recibes el dinero, cuál es la orientación de ciertos objetos y muchos detalles como estos puede asegurar una gran diferencia en tu vida.
¿Qué es el feng shui?
El fen shui que es una milenaria práctica de origen chino se basa en la mezcla de las personas y todo su entorno. Esto se basa en la creencia de que la energía vital a la que muchos llaman “Chi” es capaz de fluir a través de todo lo que hay alrededor de nosotros, esto involucra nuestra casa, también el trabajo. Al aplicar los principios básicos mejoramos el flujo de esta energía en cualquier sitio, logrando una mejoría en la salud, aumentando la prosperidad y además la felicidad.
Conociendo las bases del Feng Shui
Se basa en varios conceptos a los cuales debemos prestar mucha atención.
Bagua: Es una especie de mapa energético de forma octogonal que se usa para hacer un análisis profundo de toda la energía de un lugar y cómo esta se encuentra fluyendo en ese instante. Cada parte de este mapa se relaciona con un elemento cotidiano de nuestras existencias.
El Yin y el Yang: Habla de dos fuerzas opuestas, pero al mismo tiempo complementarias que la dualidad presente en el universo. El yin se relaciona con lo femenino, la pasividad, la tierra y oscuridad. El yang corresponde a lo masculino, el cielo, la luz y la actividad. El equilibrio entre estos dos componentes es de lo más importante y vital.
El Chi: Como se mencionó anteriormente, el chi es la energía vital que impregna todo. Un flujo armonioso de chi es esencial para el bienestar. Esta práctica apoya el fluir de las situaciones para evitar aquellas que causan estancamientos.
Cinco Elementos: Son: madera, fuego, tierra, metal y agua y cada uno representa diferentes tipos de energía muy relacionadas entre sí.
Aplicaciones en el Hogar
Su uso de relaciona a cualquier espacio, pero sabemos bien que el hogar es un lugar especial u también donde pasamos la mayor parte del tiempo y de nuestras vidas. Al aplicar todos los principios básicos en casa, podemos adquirir la capacidad de crear un ambiente más armonioso y propicio para nuestro crecimiento y salud.
Entrada
La entrada principal se considera “la boca del chi”, ya que es por donde la energía entra en el hogar. Debe ser un espacio limpio, ordenado y bien iluminado. Evita colocar obstáculos que bloqueen el flujo del chi, como muebles grandes o pilas de objetos. Una planta sana o un elemento decorativo agradable pueden dar la bienvenida a la energía positiva.
Salón
El salón es el espacio donde la familia se reúne y socializa. Necesita tener esa característica de lugar acogedor y cómodo, en este caso el flujo de chi tiene que ser suave y cuidadosamente equilibrado. Los muebles deben estar colocados de manera que faciliten la interacción entre los presentes. Evita colocar sofás o sillones de espaldas a la puerta.
Dormitorio
El dormitorio debe ser un espacio tranquilo y relajante, propicio para el descanso y la intimidad, la cama debe ubicarse correctamente para lograrlo. Según el feng shui donde debe ir la cama es lejos de la puerta, pero con una visión clara de ella. Evita colocar la cama directamente en línea con la puerta o debajo de una ventana. Los colores suaves y los materiales naturales son ideales para crear un ambiente sereno.
Cocina
La cocina en varias regiones del mundo personifica la nutrición y también abundancia, es por esto que necesita ser un espacio limpio y ordenado. Debe contar con una gran ventilación, por otra parte, el fregadero y las hornillas no deben estar frente al otro, ya que representan el fuego y el agua que son elementos opuestos.
Baño
El baño es un lugar particular donde la energía en su mayoría es drenada. Es importante mantenerlo limpio y bien ventilado para evitar la pérdida la energía positiva que exista allí. Un consejo es tapar el inodoro cuando no esté en uso.
Los Cinco Elementos en la Decoración
Al integrar los cinco elementos en la decoración del hogar se logra equilibrar el chi. Estos pueden venir a través de diversos materiales y formas, representando elementos a través de objetos cotidianos.
Fuego: Velas, chimeneas, colores rojos, naranjas y púrpuras.
Madera: Plantas, muebles de madera, colores verdes y marrones.
Metal: Objetos metálicos, colores blancos, grises y dorados.
Agua: Fuentes, espejos, colores azules y negros.
Tierra: Cerámica, piedra, colores amarillos y ocres.
¿Por qué es importante el Bagua?
Este se usa para analizar la distribución del chi en el hogar permite identificar áreas que necesitan ser potenciadas. Al activar las diferentes áreas del bagua con elementos y colores adecuados, se pueden mejorar aspectos específicos de la vida.
Reglas en casa
Orden y Limpieza: Un espacio ordenado y limpio permite que el chi fluya libremente. Olvida y desecha cada uno de los objetos que ya no necesites. Esto te ayuda a tener un hogar muy limpio y ordenado.
Deja entrar la luz Natural: Esta de verdad es fundamental para lograrlo una buena aplicación, debes abrir las ventanas y cortinas para permitir que la luz entre en toda la casa.
Plantas: Las plantas son excelentes para mejorar la calidad del aire y atraer energía positiva. Elige plantas sanas y fáciles de cuidar.
Espejos: Los espejos pueden ampliar visualmente un espacio y reflejar la luz. Sin embargo, es importante colocarlos correctamente para evitar reflejar imágenes negativas o distorsionadas.
Colores: Los colores tienen un gran impacto en el chi. Elige colores que te hagan sentir bien y que armonicen con el entorno.
Color: fuente de energía
Se considera que el color es energía en forma de luz que vibra a diferentes frecuencias. Esto a su vez influye en cosas como estados de ánimo, salud y además emociones. Se usa esta comprensión para crear espacios que ayuden a lograr la armonía y el equilibrio. Al elegir los colores para nuestros hogares y lugares de trabajo, estamos escogiendo energías.
Colores y elementos ¿Cómo se relacionan?
Cada color se vincula con un elemento y, por ende, con una serie de características:
Madera: Con el color marrón y verde, tiene un significado de crecimiento, vitalidad y de renovación. El verde es ideal para espacios que buscan provocar la calma y la conexión con la naturaleza. El marrón, en tonos suaves, aporta estabilidad.
Fuego
Encarna pasión, energía, entusiasmo. El rojo es un color muy potente que debe usarse con moderación, su exceso puede generar agitación, el naranja estimula la creatividad y la alegría y tonos púrpura y rosa que pueden aportar un toque de romance y espiritualidad.
Tierra
Se asocia con la seguridad, estabilidad, conexión, nutrición y podemos hallar colores como amarillos, ocre y beiges en esta clasificación. Los tonos amarillos suaves fomentan la concentración y el optimismo. Los beige y ocres aportan calidez y confort.
Metal
Representa la claridad precisión, comunicación, organización y están presentes colores como: blanco, dorado y gris. El blanco siempre representando la pureza y la limpieza, el gris se encarga de dar equilibrio y serenidad mientras que el color dorado se asocia con la abundancia.
Agua
Representada por los colores negro y azul, que hacen referencia a la fluidez, introspección, sabiduría y la calma. El azul en tonos suaves induce a la relajación y la tranquilidad. El negro, usado con moderación, aporta profundidad y misterio.
Aplicación Práctica del Color
Lograr esto no se trata simplemente de pintar las paredes de un tono y ya, de hecho, hay que prestar atención a la interacción de los colores con la luz natural, la orientación de la habitación y todo el espacio.
Habitaciones: Se recomiendan para estos espacios el uso de colores relajantes, como azules, verdes o tonos pastel, promoviendo así el descanso.
Salas: Aplica el uso de colores más estimulantes y cálidos, como amarillos o naranjas ya que esto promueve la comunicación y la interacción social.
Cocinas: Diversos tonos de blancos crear una visión de limpieza y luminosidad, mientras que toques de verde pueden simbolizar frescura y vitalidad.
Oficinas: Hay colores que estimulan la concentración, productividad, un ejemplo son los azules, verdes o tonos tierra suaves.
Lograr la armonía total
El objetivo principal que se tiene con el color es crear un ambiente balanceado. No se trata de usar un solo color en exceso, sino de combinar diferentes tonalidades de manera que se complementen entre sí. Observar el entorno natural puede ser una gran fuente de inspiración para lograr este objetivo con certeza.
Solo basta con aplicar todos estos consejos para poder equilibrar todos los elementos existentes en un ambiente. Es, de hecho, una forma bastante orgánica de mejorar los espacios, pero también el equilibrio entre el entorno y nosotros. Este suele ser afectado por diversos motivos, pero puede restaurarse con ciertos conocimientos que esta práctica les brinda a todos sus seguidores.